Parte del éxito de la biblioteca reside en contar con un número mínimo de títulos y volúmenes de libros, revistas y otros formatos que se deben ir incrementando paulatinamente; también deben integrarse materiales que propicien la investigación y la difusión de la cultura entre los usuarios, para ir más allá de los requerimientos del cumplimiento del plan de estudios. Para consultar la normatividad sobre la cantidad de materiales que debe contener una biblioteca escolar y universitaria, consulte la sección Normatividad.

La colección de la biblioteca puede estar constituida por los siguientes tipos de materiales:

  • Libros de ficción y no ficción,
  • Obras de consulta,
  • Publicaciones periódicas: revistas y diarios,
  • Documentos oficiales,
  • Documentos impresos de breve extensión: recortes de diarios, artículos de revistas, folletos,
  • Dossiers: antologías sobre un tema determinado,
  • Multimedia: videocasetes, audiocasetes, cd-rom, dvd, archivos de 3.5 mm,
  • Imágenes fijas: fotos, carteles, mapas, dibujos, ilustraciones,
  • Objetos tridimensionales: maquetas, globos terráqueos, modelos anatómicos, colecciones edafológicas o de seres vivos, juegos didácticos, etc.,
  • Archivos de computadora y ediciones de electrónicas: cd-rom, dvd, archivos de 3.5 mm.,
  • Ediciones electrónicas: de libros, publicaciones periódicas, que pueden estar en línea o almacenarse a nivel local,
  • Folletos.

Estos materiales pueden tener el formato tradicional, que es el impreso en papel, o bien, en otros soportes como son en diapositivas, el auditivo, audiovisual, tridimensional, electrónico y multimedia.

Los materiales mencionados constituyen la colección que se requiere en cada institución para apoyar los programas de estudio y forman las diferentes secciones de una biblioteca: